El debate sobre el impuesto a las Ganancias y los reclamos para
incrementar el mínimo no imponible generan diagnósticos similares en
espacios políticos totalmente diferentes.
Clarín consultó a
seis especialistas que coinciden en la necesidad de trabajar en una
reforma tributaria, pero que presentan disidencias a la hora de qué
conviene hacer hoy: incrementar el mínimo o dejarlo como está , a
pesar que cada vez más trabajadores tributan porque las actualizaciones
que aplicó el Gobierno no fueron a la par de la inflación.
La
CGT y las dos CTA reclaman una suba del mínimo no imponible porque
actualmente los empleados sin hijos pagan Ganancias si tienen un sueldo
de bolsillo mayor a los $ 5.782 y los casados con 2 hijos si cobran más
de $ 7.998 mensuales. Los técnicos de la primera línea del Ministerio de
Economía argumentaban durante los últimos días que no conviene
incrementar el mínimo porque, estiman, que los sectores que hoy pagan
Ganancias ahorrarían una mayor proporción de sus ingresos. En cambio, el
Gobierno, sin modificar el tope, cuenta con esos recursos para
destinarlo a sectores que los vuelcan íntegramente al consumo.
La
recaudación de Ganancias representó en 2011 el 1,9% del PBI, mientras
que en los países desarrollados alcanzó el 7,6%. “Existe un tratamiento
desigual entre los ingresos laborales y los financieros, pero también
entre los trabajadores asalariados y los autónomos”, opinó el economista
que acompañó a Elisa Carrió durante sus épocas del ARI, Rubén Lo Vuolo.
Una postura similar tuvieron el ex subsecretario de Coordinación
Económica Alejandro Robba y la directora del programa de Política Fiscal
del CIPPEC, Luciana Díaz Frers. “Tal vez llegó la hora de avanzar en una reforma fiscal que grave ciertas rentas hoy no alcanzadas
”, estimó el economista de la Gran Makro, mientras que la investigadora
del CIPPEC dijo que existen “injusticias asociadas a este debate, como
es el hecho de que la renta financiera esté exenta, o que los altos
niveles de economía negra hagan que haya una carga a soportar desmedida
sobre los asalariados del sector formal”.
El presidente del Banco
Ciudad, Federico Sturzenegger, y el titular de la Fundación Pensar
(think tank que asesora a Mauricio Macri), Miguel Braun, coinciden en
que una reforma tributaria debería estar acompañada por políticas que
también apunten a minimizar la evasión impositiva y en que es
indispensable revisar las partidas de gasto. El presidente del Ciudad
dijo que en Estados Unidos el 60% de los ciudadanos paga Ganancias,
mientras que el impuesto a las ventas, que sería el equivalente al IVA,
ronda el 8%, y esto genera una estructura tributaria menos regresiva.
“En Argentina la carga tributaria es del nivel de Suecia, pero te da
servicios del nivel América Latina”, agregó.
Las respuestas de los investigadores son diferentes cuando Clarín
les consultó qué conviene hacer hoy: incrementar el mínimo o no.
“Tenemos que tener presente que los recursos que no se recauden por un
aumento del mínimo va a haber que recaudarlo de otro impuesto o bajar el
gasto, el primer impuesto que bajaría no sería Ganancias, sino los más regresivos como el impuesto inflacionario o el IVA”
, opinó Sturzenegger. Robba dijo que “discutir la eliminación del
mínimo no imponible en estos momentos restaría recursos para continuar
con las políticas de sostenimiento de la demanda agregada que impactan
sobre un universo mayor: trabajadores de ingresos bajos, informales y
desempleados”, mientras que para la investigadora del CIPPEC “ Ganancias es el impuesto progresivo por excelencia
: quien promueve su baja está defendiendo a quienes tienen un trabajo
asalariado formal y se encuentran en el 20% de la población con mayores
ingresos”.
Braun estimó que la no actualización del mínimo
representa “un aumento del impuesto no legislado que baja el salario
real”, mientras que Lo Vuolo, dijo que es llamativa “la falta de ajuste
prácticamente no sólo del mínimo no imponible, sino de los beneficios
sociales”. “Tienen razón los que dicen que el escenario es injusto
porque la inflación hace lo que no se animaron los legisladores, y eso
está mal porque el sistema tributario tiene que ser juzgado por el
Congreso, pero también tienen razón los otros porque Ganancias es de los
impuestos más progresivos”, opinó el economista de la Universidad de La
Plata Martín Tetaz.
Para él, el Gobierno podría cumplir con la
ley ajustando el mínimo no imponible con el Índice de Precios Mayorista y
al mismo tiempo, preocuparse para que el salario real sea cada vez más
alto y más gente quede comprendida dentro de este impuesto.
Fuente: ieco clarín 01-07-2012